Un terroir excepcional
El clima frío y seco, las temperaturas extremas, el suelo rico en minerales y el agua pura de deshielo dan lugar a pasturas naturales de gran calidad. Estos pastos, junto con la crianza libre y sin estrés de los animales, son la clave del sabor excepcional del cordero patagónico.
Un sabor sin igual
Su carne es tierna, jugosa y con un sabor intenso y ligeramente ahumado, producto de la alimentación natural y del aire puro de la Patagonia. Un sabor que conquista paladares exigentes y que lo distingue de cualquier otro cordero del mundo.
La carne de cordero patagónico es un producto premium, sostenible y con un fuerte arraigo cultural. Detrás de cada corte hay una historia, la de un pueblo que vive en armonía con la naturaleza y que ha sabido preservar las tradiciones ganaderas ancestrales.
Descubra la magia de la Patagonia en cada bocado
Experimente la explosión de sabores y texturas que solo el cordero patagónico puede ofrecer. Un viaje culinario sin igual que lo transportará a la tierra más austral del planeta.
