El cordero patagónico es un manjar que conquista paladares por su sabor único y su textura suave. Su cocción tradicional, a la cruz, es un ritual que se transmite de generación en generación en la Patagonia argentina.
El secreto de la cocción a la cruz
Se cava un pozo en la tierra y se coloca una cruz de madera.
Se ata el cordero a la cruz, con las patas extendidas.
Se enciende un fuego debajo del cordero y se cocina lentamente durante varias horas, con brasas de leña.
La cocción a fuego lento permite que la carne se cocine de manera uniforme y que se impregne del sabor ahumado de la leña.
Tips para un cordero perfecto
-Utilizar un cordero joven y de buena calidad.
-Marinar el cordero con anticipación con especias, hierbas aromáticas y aceite de oliva.
-Controlar la temperatura del fuego durante la cocción para evitar que la carne se queme.
-Dejar reposar la carne unos minutos antes de cortarla para que los jugos se redistribuyan.